La ciudad monumental de Cáceres a la luz de las velas, con esa magia de lo que, más que verse, se intuye. 30.000 velas alumbrarán durante las noches del viernes 4 y el sábado 5 de junio todos los recovecos del casco histórico, lo que creará una estampa inédita que intenta atraer a muchas más personas hacia sus calles, el eterno reto de la zona más preciada de la ciudad. Es una iniciativa que pone en marcha el Ayuntamiento de Cáceres con presupuesto de los fondos de cooperación transfronteriza Netur, un programa que inyectará casi un millón de euros para incentivar el turismo en la ciudad.
'Cáceres a la luz de las velas' se plantea como una acción participativa-transformadora. La idea es que más de 30.000 velas adornen las cornisas, rejas, calles, fuentes, puertas y escaleras del casco histórico durante esas dos noches.
Tal y como explicó el concejal de Turismo, Francisco Torres, la idea es dar una alternativa para que el casco monumental atraiga a la gente, a mucha más gente. Se apagar án las luces artificiales para que las velas proyecten su particular iluminación sobre la piedra. «La idea es que esta zona se vea de diferente manera a como se ve normalmente», aseguró Torres.
Voluntarios
Aunque se va a pedir la participación ciudadana voluntaria esto no significa que cualquiera pueda colocar sus propias velas. La organización establecerá el orden y la disposición de las velas, para buscar una homogeneidad y que el efecto sea bonito y llamativo. Eso sí, se intentará que gracias a la colaboración de la gente, las velas permanezcan encendidas durante todo el tiempo que dura esta acción. Además de las velas esa iniciativa se completará con la presencia de animación, de personajes que evoquen cómo se vivía durante el siglo XVI en la ciudad de Cáceres. De nuevo ese recurso tan usado de la recreación a través de actores.
Según Francisco Torres se informará a los hoteles de Cáceres para que difundan esta iniciativa entre los turistas que se acerquen a la ciudad durante ese fin de semana, en un intento por hacer aumentar las pernoctaciones.
La idea juega con las velas, un elemento tradicional a lo largo de la historia de la humanidad y con una presencia fundamental en las iglesias que pueblan el casco histórico. Por otro lado, no es la primera vez que la luz se convierte en la protagonista decorativa de la ciudad monumental. El festival Urban Screens que se celebró el pasado mes de octubre iluminó fachadas como la de la Preciosa Sangre, el Ayuntamiento o Santa María.
"HOY" (22-05-10)
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